Si no dejas el paso a la verdad POR DARLE FACILIDADES O FAVORES A LA SINRAZÓN, ya todo lo que haces es OBJETIVAMENTE CRUELDAD siempre reforzando sus mecanismos o, con sus inevitables consecuencias, matar.
Tú no puedes atender lo mismo a Dios que al diablo, ¿lo entiendes ya? Tú no puedes atender lo mismo
al que limpia -el bien- que
al que ensucia -el bien-, ¿lo entiendes ya?
Tú no puedes atender lo mismo al que se rompe los huesos demostrando luz-razón que al que vil confunde ¿lo entiendes, españo-monstruo?
Todas las acciones, objetivamente no requieren no más de cien esfuerzos, sí, excepto
el demostrar luz-razón que es lo único que requiere miles de millones de esfuerzos (las
renuncias cada segundo a privillegios de irracionalidad o de lo establecido,
el soportar miles de sinrazones y cada una con sus sobreprotegidos respaldos o cuchillos de mentiras en buenismo, también el
resolver prejuicios -incontables- sabiendo que cada uno conlleva unos cientos arraigados a él, etc). Entonces, claro, por lógica, por alma o
por juego limpio, le corresponderan a esos esfuerzos su debida proporcionalidad en compensaciones -a no ser que ellos tengan ya nazismo desarrollado hasta en los pelos, ¡asco!-.
Los errores -o las exigencias de la realidad- no dejan de existir porque se les ignore -ni jamás serán corregidos así si se les ignora-