--------------Cuando no se le ayuda a la verdad, la mentira se impone (y sus daños).

miércoles, 10 de junio de 2015

Todo es infinita mentira destructiva - en los intelectuales españoles.  Lo que dicen únicamente atiende a no reconocer nada,  a no aceptar reglas éticas y a no aceptar jamás reglas racionales; por ello únicamente aplican: 
-"ellos se lo guisan y ellos se lo comen", masacrando al que pueda rebatirles o a la razón misma -imposición: algo solo de nazis-,
- la técnica de la "autoayuda" -con la cual se ponen todos como maestros de la vida, siendo mendrugos totales-
- el "lameculismo" y la "doble moral" -lo mismo son de una cosa y de lo contrario -a contrahonor-, elogian como negocio o para agrandar sus protagonismos intolerantes y "vacíos", 
- la anulación racional o el anularle su prioridad (sí, siempre entienden "lo que les interesa", por lo que eso es solo anteponer "sus intereses")
Dudo que algún intelectual español tenga un coeficiente intelectual mayor de cincuenta, sí, por lo que demuestran. Y ¡no tienen alma!

3 comentarios:

José Repiso Moyano dijo...

-- Unos se esfuerzan miles de veces más que otros a contraprotección y a contradignidad y no tienen ni un trozo del camino sin zancadillas; mientras que otros totalmente nada y, siendo nada, se atreven a decir -o lo venden los HdP- que es mucho y encima lo tienen todo a favor -o bastante por seguro- y reciben miles de compensaciones por nada, o por ser HdP sin límites para no serlo y sin escrúpulos. * Pues todas las astucias -y los negocios y las mentiras que conllevan- se acaban o son imposibles con límites de vergüenza y de ética. Pero ¿saben lo que es eso? Los genocidas escritores españoles son únicamente protectores del nazismo absoluto, o sea, de lo impuesto o de la mentira, de la antiliteratura o de la literatura hecha con todos los elementos de justificación de la antilibertad o de la antiinteligencia, ofreciendo la infinita estupidez o el disco rallado total de HdP de ellos.
7 de septiembre de 2011

-----


Toda la crueldad posible se concentra en el "entre ellos". Reconocen, sí, pero entre ellos y a los de ellos; protegen, sí, pero entre ellos y para los de ellos; aman la amistad y la generosidad, sí, pero entre ellos y con los de ellos, etc. Todos los crueles aplicaban y aplican ese "entre ellos" o "entre nosotros" (todos, hasta los nazis, amaban, sí, pero entre ellos). Es decir, llevan todos los valores y principios éticos a un circuito cerrado y corrupto de conveniencia; y, así, los intentan seguir, ya manipulados a su conveniencia y a su corrupción interior. Así, ellos no cumplen el bien ni nada, no, sino que el bien lo adaptan a su crueldad y aplican luego ese bien ya interesado. Eso es lo que ocurre en España, todo lo amoldan a lo que les interesa; amoldan la ética a sus retorcidos intereses, amoldan la razón a sus retorcidos intereses, amoldan la fe a sus retorcidos intereses, amoldan todo a sus retorcidos intereses. Cuando el bien, la razón, etc., es precisamente TODO lo contrario


17 de junio de 2014

José Repiso Moyano dijo...

El español es terco y terco en mantenerse en el error. Si se le dice que dos y dos son cuatro siempre sale en que es otra cosa... "por defender la sinrazón en su terquedad y en sus intereses".

Claro, ¡eso es lo único que destruye en el mundo o todo deriva de eso!, ¡ès el mismo mal total!

José Repiso Moyano dijo...

El español ni vive (por algo limpio) ni deja vivir, ¡el colmo de la INTOLERANCIA!