--------------Cuando no se le ayuda a la verdad, la mentira se impone (y sus daños).

sábado, 9 de febrero de 2013

MITOS -o, mejor, estupideces de total mentira- QUE SIEMPRE TIENEN MUCHOS GRANUJAS ESPAÑOLES:

-  "El que acusa es el que debe demostrar la culpabilidad": ¡Mentira!, pues un genocidio aunque no sea acusado ya es una culpabilidad de genocidio; y así es todo lo atroz.
-  "La generalización no se debe hacer moralmente": ¡Mentira!, pues Jesucristo vino a salvar a todos los seres humanos -no a unos sí y a otros no- y, si vino a salvarlos, es que todos no estaban ya salvados o inmaculados o inocentes. Sí, eso es una absoluta generalización moral, hecha por las mismas bases morales.
Algunos dicen -como pillos- que es necesario mentir; pues jamás es necesario, a no ser que sean sinvergüenzas totales, ya que la mentira NUNCA tiene utilidad socialmente,  -otra cosa es que algo íntimo o sin relevancia social no quieras sincerarlo-.

3 comentarios:

José Repiso Moyano dijo...

Si existe una vídeo -o una prueba- en donde un niño o una mujer es violada por el Señor X, pues el Señor X tendrá sin más que demostrar su inocencia, aquí, en Egipto o en Singapur.

Y no esperar a que alguien le demuestre -por si le da por eso o en un país que no le permitirá eso- que es culpable.

José Repiso Moyano dijo...

El poder judicial acusa -en lo más grave- con beneficios de acusamiento, si se daña la imagen de la inmobiliaria ya no, pues hay bonito dinero en medio y no trae cuenta a lo pillo.
Genocidios, crímenes de lesa humanidad, todos los delitos graves ecológicos... permanecen objetivamente sin ser juzgados ni acusados.
¡Pero los hechos mandan!

Acusar a las multinacionales farmacéuticas tampoco, pues no tiene beneficio pillastre de acusamiento.

José Repiso Moyano dijo...

Si una persona DECIDE matar a un perro y lo mata, ahí solo ha podido intervenir él y su decisión -y los demás no tienen responsabilidad ni culpa-; por eso, ahí objetivamente no cabe la generalización.

Pero si en un país hay una costumbre injusta, una dictadura, una incultura, pocos derechos humanos, etc., ahí, o en todo eso objetivamente intervienen todos y todos tienen -en un más o en un menos- una clara responsabilidad y culpabilidad.

La sociedad -con sus injusticias- la hacen todos, no Pedrito sí y Juan no.