--------------Cuando no se le ayuda a la verdad, la mentira se impone (y sus daños).

sábado, 19 de mayo de 2012

ESTAR NO PARA LAS REGLAS DEL TRABAJO -DE LA HONRADEZ-, SINO PARA LAS OBEDECIDAS REGLAS DE ESTE JUEGO DIABÓLICO -Y JUEGAN CONTIGO-:

3 comentarios:

José Repiso Moyano dijo...

No te dirigen a unas limpias reglas de honradez, sino a las de su juego predeterminado.

Diferencia entre los bancos y tú: que a los bancos siempre les ayuda el Estado y el uso especulativo que rentabilizan de tu dinero, pero a ti no te ayuda por seguro ni el Estado ni el dinero de otros.

José Repiso Moyano dijo...

De una vez por todas, la condición natural de la sexualidad de una persona forma parte de la genética y del instinto; por lo cual no se puede eliminar ni es modificable.
¡Sí!, el instinto lo podemos adaptar a nuestra vida social, como hacemos con los animales, pero eso no significa más que REPRIMIR el instinto salvaje que poseen PARA NUESTRA CONVENIENCIA O PROVECHO -es la domesticación: una "humanización" del animal que éste no tiene como propiedad natural y, también, que éste no elige NUNCA-.

El ser humano sí ha reprimido el instinto salvaje a favor de "lo civilizado", pero ¡lo ha elegido!

Aunque, cuando se trata del instinto sexual, como es el caso de los homosexuales, es inservible y peligrosa la represión; puesto que su modificación NO ES POSIBLE -no se puede cambiar ni lo genético ni los instintos-.

En claro, se puede predisponer lo genético para un ser vivo que vaya a nacer o vivir. Pero esto es PREDISPONER, no modificación.

Modificar o cambiar es que, a una persona que ya vive, se le cambie su código genético contenido en las células, algo que a ese ser ya lo identifican; lo que significa eliminarla o eliminarle su identificación, o sea, eliminar la persona que es.

José Repiso Moyano dijo...

MANIPULACIÓN Y DESVIRTUACIÓN DE LOS VALORES ÉTICOS

La afección por un grupo -en dependencia emocional- es algo que condiciona la concepción que tiene cada cual de los valores éticos. En eso, se puede justificar todo, cierto, en un acomodo fácil de autoconvencimiento cualquier hecho es justificable con una u otra maleabilidad de beneficio propio -eludiéndose la responsabilidad-.

Porque, para cada uno, "los suyos" son los buenos o "los que están con él"; en un grupo de explotadores, en sus opiniones y en sus acciones, "los suyos" y no otros son los buenos con todo tipo de aprecio y de protección, "los suyos" en una modelación del bien y del mal hacia eso, hacia ese montaje de conveniencia.

En un grupo de Facebook, ocurre igual; en un grupo de patriotas, igual; en un grupo de cínicos escritores, igual; en un grupo de radicales e intolerantes judíos, igual; en un grupo de acomodados católicos, igual; en un grupo de admiradores de un pijo cantante, igual.

"Los suyos" o "los que están con él" -sin criterios demostrados y en ceguedad- son los buenos; y, al momento, a eso ahíla todas la acciones, todas la opiniones y difusiones, todos los beneficios que de él se desprenden.

Y, por supuesto, el mundo quiere cambiarlo, sí, pero CON ESO ya determinado, que "los suyos" son los buenos, porque le viene bien, por tener apoyos "comprados con eso", por ahorrarse cualquier lucha de esfuerzo o de sacrificio personal, por ya crear una gran dictadura del proletariado benevolente de "los suyos", de solo "los suyos" a implacable impunidad.