--------------Cuando no se le ayuda a la verdad, la mentira se impone (y sus daños).

lunes, 18 de enero de 2016

Solo basta que ayudes a una sinrazón-mentira para que seas indecente, lo mismo que solo basta que una manzana tenga algo podrido en inicio pero, por definición, ya está podrida.
Los recursos para que se acepte una mentira son muchos -por medio de incontables trucos de incontables intereses, de poder y más poder-;  en cambio, los recursos para que se acepte una verdad están siempre desprotegidos, bastantes están eliminados porque molestan pero, en general,  son muy limitados.
Una mentira jamás gana sin "cultura" -que es un modo de guiar social hacia intereses sobreprotegidos que impongan establecimiento o moda- o sin poder, el cual la hace dominante o rentable.
La cultura determina las mentes (pues siempre ella crea estereotipos) por servilismos radicales (de costumbre, de seguir complaciendo a tal institución o poder, de dejar intocables privilegios religiosos, machistas,etc.) con constante involución hacia la razón.
Así es, ¿cuántas millones de mujeres están ya determinadas a nunca ser libres por solo cultura? Por eso, la libre-verdadera "cultura" es aprender sin limitaciones (a donde te lleve la razón-verdad), nunca lo que los demás te digan o te determinen.

2 comentarios:

José Repiso Moyano dijo...

Proteger al error, impedir la razón, proteger al mal (o proteger a la sinrazón) ya conlleva todos los insultos posibles, ya conlleva objetivamente el insulto per se, el insulto solo destructor, tal insulto al cual no le es válida alguna justificación ética o es el que siempre es crueldad. Y, aunque se vista a mil formas o formalismos de conveniencias-falsedad, sigue siendo crueldad per se. Y ya, quienes lo aplican -como muchos intelectuales españoles-, ¡no tienen alma!, porque han cedido los principios-valores de sus almas por los beneficios del proteger a la sinrazón. Y... ¡no se enteran o solo les conviene el vender libros de mentiras-suciedad, de procedencia antiética!; sí, el mal no lo hacen ni lo pueden hacer los carpinteros, sino única y objetivamente ¡VOSOTROS!

8 de diciembre de 2015

José Repiso Moyano dijo...

"No importa cuantas palabras sagradas hayas leído, no importa cuantas has dicho. No sirven de nada si no actúas de acuerdo a ellas". Buda. LAS PALABRAS, SI QUIEREN SERVIR A LA VERDAD-LIBERTAD-HONESTIDAD, no pueden ir ornamentadas de mentiras, de rodeos o de enturbiamientos, sino solo de directa verdad y de directos brillos de realidad. El vocabulario (el que no es aceptado a conveniencia por el hipócrita-corrupto) es lícito, honesto, bueno o justísimo si va dirigido no callar ni esclavizar a la verdad; y ha de ser lo más acusatorio si acusas sin teatros a injusticias, ni más ni menos. Al que le guste darles ornamentos de mentira a la verdad, pues ¡miente como un miserable bellaco o vendido!

22 de diciembre de 2013

Todo lo injusto o lo que es cruel es una resistencia a admitir la razón, sobreprotegiéndose otra cosa u otros intereses. Por sinergia de tales intereses, la razón -y sus esfuerzos- se desprotege y se pisotea porque no va exclusivamente a defenderte a ti o a otro, sino -sin marginalidad- a todos, lo que conlleva una confrontación a los privilegiados que poseen todos los recursos de mediación -de los cuales no estás libre y te utilizan-.

----

Tú podrás decir que luchas -al igual que muchos, ¿quién no lucha con más o menos comodidad?, pues luchar con sinrazones es FACILÍSIMO-, pero tu lucha está ineludiblemente DIRIGIDA por lo que te machacan los medios y por lo que te contagias de demagogias interesadas de unos o de otros. Pero, el que es ético, no tiene una lucha dirigida por todo eso -y por sus beneficios-, sino atiende a las propias e insobornables exigencias éticas, que se ningunean por poderes y se desprotegen; por lo que tú lo pisoteas siempre: consciente o inconsciente

14 de enero de 2015