--------------Cuando no se le ayuda a la verdad, la mentira se impone (y sus daños).

viernes, 30 de enero de 2015

En el contexto social, únicamente LOS RESULTADOS son la objetividad (la razón) y, lo demás forma parte del rollismo de la mentira y del conseguir poder o beneficios particulares.

Así es, y el bien ético está hecho -o es solo verdad- en función de LOS RESULTADOS DE BIEN.  Es una falacia miserable, manipuladora e infinita el decir -o dar ya por hecho, contra la probación o contra la razón- que una mayoría ya es generosa; porque lo único que prueba el que lo sea -sobrando todas la palabritas- son LOS RESULTADOS DE GENEROSIDAD en el mundo.  Y, si los resultados de generosidad en el mundo son máximos o de una mayoría ¡ya está todo arreglado!,  significa eso que en realidad hay una maquinaria de generosidad suficientemente máxima -o que está al máximo trabajando- para que no haya ni siquiera una carencia de primera necesidad en el mundo.
Claro, eso no es así, en evidencia; por lo tanto, en dura realidad, la generosidad solo es un deber ético (una deuda ética) solo DESEADO por una mayoría -lo mismo que desea ser sincera o libre o pacífica desde la noche de los tiempos-.  Entonces, el entropismo de la enseñanza y de la mediación ya difunde el deseo como hecho (la mentira como verdad), pero queda que sea hecho.

3 comentarios:

José Repiso Moyano dijo...

Otro deseo difundido ya como hecho es lo del control del hombre sobre la naturaleza,
o lo de que es la "especie elegida" (¿por quién?),
o lo de que tiene el monopolio de la inteligencia (situando a las otras especies en el estercolero de la inutilidad inteligente, en humillación exterminadora),

y un largo etcétera.

José Repiso Moyano dijo...

Es lo que pasa a algunos fanatismos de la cultura: ellos ya se sitúan en el monopolio del privilegio, del "hacer cultura", del "hacer literatura", del "hacer paz!, y EXTERMINAN a los que de verdad lo están demostrando ¡de un plumazo!

José Repiso Moyano dijo...

En honor a la verdad, había personas que conseguían la libertad y otros -no superando esclavitudes- no conseguían la libertad. Por lo tanto, unos solo eran libres.

Había personas que conseguían la honradez (por no venderse a los intereses corruptos del poder, de la religión, de la deshonradez reinante, etc.) y otras que no ofrecían resistencia a ninguna deshonradeez y no conseguían la honradez plenamente ética.


Las cosas HAY QUE HACERLAS, no solo desearlas y difundirlas a bombo y platillo.


Y así todo lo ético...