Al que le favorece la mierda -ése que ya tiene poder e imposición por tal favoretismo- va a hacer todo lo posible para que la mierda siga ahí, ¡ahí y ahí!, a todo pesar, a contrarremordimiento, a contraética y a contrarrazón -, y además con motivación interior: él se cree un gran buenismo que se inventa a su medida-.
Y si es el mismo poder, va a hacer todo -con todos los recursos de todos- porque la mierda siga ahí, en imposición.
Y fortalecen como si nada unos mecanismos mafiosos para que todo eso siga adelante. Por ejemplo, ¿durante cuánto tiempo la televisión valenciana durante la corrupción estuvo sirviendo a lo no ético, alimentando tanta cultura y tanta información desvirtuada de lo que debía ser? Pues montajes literarios también se han hecho con lo mismo, aprovechándose -con graves consecuencias- de lo que no es cultura.
Y si es el mismo poder, va a hacer todo -con todos los recursos de todos- porque la mierda siga ahí, en imposición.
Y fortalecen como si nada unos mecanismos mafiosos para que todo eso siga adelante. Por ejemplo, ¿durante cuánto tiempo la televisión valenciana durante la corrupción estuvo sirviendo a lo no ético, alimentando tanta cultura y tanta información desvirtuada de lo que debía ser? Pues montajes literarios también se han hecho con lo mismo, aprovechándose -con graves consecuencias- de lo que no es cultura.
Pero como si nada ejecutan una crueldad conveniente -para ellos-. Si la mierda cuenta con poder, te la imponen, siempre por seguro la imponen.
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