Están los que odian al comunismo (y no lo toleran creando crispación social), los que odian el islamismo en su naturaleza primera o integral (y no lo toleran creando crispación social), los que odian al inmigrante "que supuestamente sólo quita puestos de trabajo" (y no lo toleran creando crispación social), los que odian al homosexual "que se cura con curaciones muy inútiles o irracionales -nunca demostradas- (y no lo toleran creando crispación social), están...; pero ¿por qué TANTO ODIO para quitar del medio a los demás? ¿por qué no vives y dejas vivir?, ¿por qué no les das ya unas vacaciones a tus prejuicios para que se pierdan de vista por... ¡unos minutos! aunque sea?
- - - Hay que luchar contra los defectos o contra los prejuicios de alguien; esto es, no odiar a ese alguien, no menospreciar sus derechos o su libertad de sentir y de vivir, no discriminar sus genes y su cultura: ¡NO QUITARLO DEL MEDIO! Sólo, sólo hay que intentar limitarle privilegios -e incluso recursos por inutilidad- que utiliza para cometer errores o injusticias, ¡eso!, por medio de la palabra, de la protesta, de la inevitable descalificación (1) a su actitud -pues toda detracción lo es-, de la denuncia, del sentido común y de las leyes. Es decir, que el mal que haga, cada vez lo haga con menos facilidad, porque se encuentra en ese camino con la indignación de ti y de la gente.
(1) A uno que roba, si hablas de sus robos, le estás diciendo por uno o por otro camino que es -por esos hechos- un ladrón; y eso SIEMPRE es una descalificación, algo que lo descalifica de civil ser humano. ¡Ah!, lo que no se puede hacer es descalificar -o insultar- gratuitamente, que no viene al caso, que no es consecuente con hechos.
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Están los que odian al comunismo (y no lo toleran creando crispación social), los que odian el islamismo en su naturaleza primera o integral (y no lo toleran creando crispación social), los que odian al inmigrante "que supuestamente sólo quita puestos de trabajo" (y no lo toleran creando crispación social), los que odian al homosexual "que se cura con curaciones muy inútiles o irracionales -nunca demostradas- (y no lo toleran creando crispación social), están...; pero ¿por qué TANTO ODIO para quitar del medio a los demás? ¿por qué no vives y dejas vivir?, ¿por qué no les das ya unas vacaciones a tus prejuicios para que se pierdan de vista por... ¡unos minutos! aunque sea?
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Hay que luchar contra los defectos o contra los prejuicios de alguien; esto es, no odiar a ese alguien, no menospreciar sus derechos o su libertad de sentir y de vivir, no discriminar sus genes y su cultura: ¡NO QUITARLO DEL MEDIO!
Sólo, sólo hay que intentar limitarle privilegios -e incluso recursos por inutilidad- que utiliza para cometer errores o injusticias, ¡eso!, por medio de la palabra, de la protesta, de la inevitable descalificación (1) a su actitud -pues toda detracción lo es-, de la denuncia, del sentido común y de las leyes.
Es decir, que el mal que haga, cada vez lo haga con menos facilidad, porque se encuentra en ese camino con la indignación de ti y de la gente.
(1) A uno que roba, si hablas de sus robos, le estás diciendo por uno o por otro camino que es -por esos hechos- un ladrón; y eso SIEMPRE es una descalificación, algo que lo descalifica de civil ser humano. ¡Ah!, lo que no se puede hacer es descalificar -o insultar- gratuitamente, que no viene al caso, que no es consecuente con hechos.
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