jueves, 18 de marzo de 2010

Una crisis (o un defícit nacional) es su respectivo gobierno el que debe gestionarla lo mejor posible, por responsabilidad y, claro, que busque estar fortalecido a través de los impuestos ha sido ya algo recurrente desde siempre (desde las primeras civilizaciones, en cuanto a que la economía nace precisamente ahí), pues es lo más fácil (el “pedir” siempre es fácil) y, además, de todos sus ciudadanos hay beneficio. Lo que ocurre es que los productos de consumo de primera necesidad suben de precio (algo fatal para los que no tienen apenas un poder adquisitivo, en discriminación) y, sobre todo, es una medida cuya eficacia depende exclusivamente de la capacidad de gestión que ya ha demostrado o supuestamente va a demostrar un concreto gobierno. Si ésa es una óptima capacidad, junto a otras muchas medidas puestas en marcha alentadoras de inversión, conformadas desde y ante la crisis (al margen de las buenas intenciones que las tiene todo el mundo) , sí puede dar unos esperanzadores resultados.
http://es.wfp.org/node/2745
www.nacion.com/2010-03-01/Mundo/Relacionados/Mundo2280548.aspx
Nuevo terremoto, ahora en Turquía.No, científicamente no se puede demostrar la existencia de lo casual. Todo fenómeno o es causado por la voluntad (intencionado) o es simplemente accidental (de causa "habitual" o natural); pero, cuando éste último presenta una frecuencia global, es porque innegablemente existe una causa global (y nueva para realizarse así).

domingo, 7 de marzo de 2010

VAN A POR ÉL Nadie ha hecho en el mundo lo que el juez Garzón por la justicia: el que respondan ante ella grandes poderosos, como los dictadores -que habían tenido siempre una total impunidad y ante los cuales todos, en cobardía, agachaban la cabeza a la hora de -cara a cara- señalarles sus crímenes-.
¿Cuál ha sido -ése- el gran agradecimiento?, el que es de buen cristiano dar ¡por justo!; pues "van a por el" -sin más- con o sin pruebas, en revanchismo de ése que "defiende la vida", todos esos idolatradores de los poderosos a los cuales él quiso juzgar -por justicia y, sin menospreciarlo, con su todo riesgo-.

www.escolar.net/wp-content/Escrito-Alegaciones-C.G.P.J.-05-03-10.doc

sábado, 6 de marzo de 2010

SOBRE ABORTO:
Yo no puedo predeterminarle la vida a una mujer (con prohibiciones y con condenas de cárcel) basándome sólo en fuentes religiosas (de tantas) o en subjetividades (tan proclives al error). No, pues eso sería un total prejuicio, ciertamente, una injusticia que no voy a crear por muchas presiones -y “tirar de piedras”- de intolerantes.
Si el aborto es ya algo inherente a la propia naturaleza de todos los animales, cuyos procedimientos de reproducción seleccionan aquellos que son más idóneos para ser desarrollados y cuidados, en la mujer no es algo, no, muy distinto; pero, en ella, a diferencia, existe una comprometida respuesta -en voluntad- desde su “condición social -no esclava-, por sus derechos, por su libertad misma -que determinará más o menos su felicidad- y nunca eso ha de ser ante una imposición cerrada de “ideas” utilizadas al arbitrio por intereses religiosos -hasta Jesucristo no imponía ni condenaba, sólo comprendía, ayudada y perdonaba-.
No, por mi parte, no estoy de acuerdo con ninguna ley del aborto puesto que, cualquier ley, es perfeccionable -a la hora de ser aceptada sin reticencias- y ya el contenido que implica es muy delicado o sensible. Si embargo, con la que estoy plenamente en desacuerdo es con la ley del aborto que protegió y consintió el partido del PP, ya que era el momento histórico adecuado para que hubiera sido perfeccionada; pero no lo hizo.
Y en cuanto a una mayor culpabilidad, es precisamente la Iglesia la que tenía que haber respondido con un verdadero interés -durante toda la historia- para cuidar esos niños de mujeres violadas -y a protegerlas-, ya que mucho tiempo en pragmatismo tuvo sin que lo hubiera dedicado a la contemplación, a prejuzgar con palabrería desde sus grandes privilegios y a esa holgazanería de “no sudar el pan” como cualquier pobre del reino de Dios (y no, tampoco, para que -ahora- muchos de sus adeptos califiquen a esas mujeres de putas y asesinas, ¡qué fácil es lo fácil!).

viernes, 5 de marzo de 2010

COMO SIEMPRE, IMPOSICIÓN ARBITRARIA
Mueren 35 niños en un incendiohttp://elcomercio.pe/noticia/421493/ocho-se-eleva-numero-muertos-desborde-rio-cusco
Todo ser humano desarrolla sus hechos conforme o dependiendo de su coherencia ética; asimismo, todo poderoso ejecuta su poder -que determina hechos- desde su coherencia ética. Por ello, es la coherencia ética en donde están las primeras causas para que sean unos hechos los que se vean en la sociedad y otros no; es decir, la menor vanidad y la mayor eficacia de esa coherencia es la base que garantizará el menor riesgo de injusticias sociales y de derroches de unos recursos vitales.
Pues bien, estando esa coherencia formada de valores éticos (justicia, generosidad, paz, libertad, etc.), un valor ético por sí mismo, y aun sobrevalorado, no es eficaz como valor ético -o, realmente, en el contexto de lo ético en general, no es... un valor-.
Por ejemplo: Si la persona X, por generosidad, da mil millones de euros a unos que ya "son ricos", esa generosidad es una generosidad injusta; si se los da a unos corruptos o a los mismos que a ella le roban, es una generosidad estúpida; si se los da a los que van a construir viviendas junto al cauce natural de un río, es una generosidad "perdida", inútil.
Eso es precisamente lo que pasa; que, por conveniencia, por ceguedad, por alinearse demasiado a grupos, a tradiciones, a gustos, a líneas aisladas, a "bandadas" provocadas por un/a político/a "de ocurrencias", tal coherencia es IMPOSIBLE. Pero, ¡ah!, por orgullos, por soberbias, por interesados positivismos siempre ahí RESALTAN un valor, con el "hemos hecho al menos eso"; eso, sí, pero de lo inútil, de una eficacia gravemente malatendida por irresponsabilidad ética.
Toda injusticia que el reconocerla perjudica directa o indirectamente a un país suele negarse. Entonces, sólo, únicamente lucha contra esa injusticia aquél que la afirma, no las ONGs, no amnistia internacional -de la forma más directa-, sino ése que hace ver esa injusticia -y la denuncia públicamente-.
La libertad de pensamiento -incluido el ideológico- es un derecho internacional; por lo cual, ningún ser humano debe ser reprimido o perseguido en ese aspecto. O sea, que ningún país debe aplicar normas o leyes -o denigraciones de "mercenario" o "traidor"- para que alguien, cualquiera, no pueda expresarse libremente. Eso es cierto pero, en realidad, ocurre todo lo contrario en muchos sitios. Véamoslo, los que forman la oposición política -los que piensan diferente- en EE.UU., ¿dónde están?, pues en su país, cada uno en su casa; los de Argentina también su país... Pero ¿dónde están los de Cuba que no sea en el exilio o en la cárcel? No más mentiras y complicidades, "caiga quien caiga",Cuba ni nadie está exento de sus abusos ideológicos, hasta en Marruecos -que pisotea muchos derechos humanos- hay militantes de la oposición política que viven actualmente allí. Insisto que no hay que esconder ninguna injusticia; incluso, si los que la reciben, piensan totalmente diferente a mí.
Sea "delincuente o -quizás- no", la responsabilidad política debe velar ante todo por la integridad física y por la libertad ideológica de cualquiera.