martes, 3 de septiembre de 2013

Para saber valorar, obligatoria o imprescindiblemente hay que saber -demostrándolo- la utilidad y la inutilidad de las cosas conforme solo a la racionalidad-ética, no conforme a una creencia o a un parecer adquirido de mediaciones o de prejuicios o del porque sí.
Cualquier afirmación tuya debe tener muchas pruebas o razones irrebatibles que la sostengan; si no, es otra astuta sinrazón.

1 comentario:

José Repiso Moyano dijo...

DARLE LAS ESPALDAS A LA VERDAD es darles las espaldas a todos los que la han luchado o representado: Jesucristo, Galileo, Gandhi, etc.

Es pisotearles...

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